Me
gusta escribir ficción, y esta historia debería estar en mi otro blog
Por
increíble que parezca este relato no fue creado por una mente imaginativa, es
una triste realidad que desconcemos o elegimos no conocer.
Julie Kitt compró un producto para adornar el árbol de navidad procedente de China . Su
sorpresa fue muy grande al encontrarse con un papel doblado en ocho, escrito en
ingles, pidiendo ayuda.
La
carta habla de condiciones inhumanas de trabajo, 15 horas diarias sin descanso,
feriados, ni fiestas, con un pago irrisorio. Si no lo hacen son golpeados,
insultados y maltratados. Se denuncia ademas
que el ejercito chino secuestra, tortura y encierra cientos de personas por sus
inclinaciones espirituales.
Julie Kitt |
La
carta no estaba firmada y Kitt consideró que era un recurso muy atrevido y
desesperado, como
un mensaje en una botella y arrojado al mar. La nota hizo un camino de más de
5000 kilometros y no pudo desentenderse de ella. Kitt publicó la carta en Facebook
e intentó transmitir el mensaje en distintos medios de comunicación y en
algunas organizaciones de Derechos humanos.
Hubiera
preferido leer este relato en el marco de la ficción, duele profundamente saber que
por más que se trate de una historia increible es tristemente cierta....